Los mineros están ya a 65 centímetros del niño que cayó en un pozo de Totalán (Málaga). Se abren ante el operativo dos posibles finales. El primero, que Julen esté vivo. En ese caso, la actuación corresponde al 061 Urgencias Sanitarias de la Junta de Andalucía. Si, por el contrario, los mineros encontraran en el pozo el cuerpo de Julen, la autoridad la tendría el Juzgado número nueve de instrucción de Málaga, que ya investiga las circunstancias de la caída del pequeño de Totalán.

La Brigada de Salvamento Minero que excava a mano la galería horizontal que debería desembocar en el pozo, a la altura a la que, suponen, se encuentra Julen, crece cada minuto y ha alcanzado ya los 3,15 metros de los 3,80 totales. Después de necesitar la intervención de los expertos en explosivos de la Guardia Civil en tres ocasiones a lo largo de la noche y de la mañana de este viernes, el avance está siendo mucho más rápido, “con la roca a favor”.

Este grupo que lleva a cabo el rescate de Julen del pozo en el que cayó el paso 13 de enero está formado en total por 26 efectivos, en concreto por ocho efectivos de la Brigada de Salvamento Minero, diez guardias civiles ocho especialistas de Montaña y dos de Actividades Subacuáticas y ocho bomberos del Consorcio.

Desde el mediodía, han tomado tierra en la zona de trabajo 3 helicópteros: el primero procedía de Sevilla con el material explosivo a bordo que se comentó esta mañana; el segundo y el tercero han traslado desde Palma de Mallorca y desde Cantabria a cuatro guardias civiles del Equipo de Montaña, especialistas en espeleología y microvoladuras (2 de cada sitio), para reforzar el dispositivo de rescate por si fuera necesario hacer relevos.