El ministro del Interior Marlaska, desvincula el cese del coronel Diego Pérez de los Cobos como jefe de la Guardia Civil en Madrid como un reajuste y evita relacionarlo con el 8-M y la dimisión del DAO
El ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, ha presentado este martes el cese del coronel Diego Pérez de los Cobos como jefe de la Guardia Civil en Madrid como una “remodelación” entre el personal de confianza y ha evitado relacionarlo con la investigación judicial sobre la posible relación de la manifestación del 8-M y el inicio del contagio de coronavirus, así como con la dimisión del DAO de la Guardia Civil, Laurentino Ceña.
En su intervención inicial, antes de las preguntas de la prensa, Grande-Marlaska también ha comentado el cese del coronel Pérez de los Cobos y la dimisión del DAO de la Guardia Civil, que asumirá el general Pablo Salas, hasta ahora jefe de los Servicios de Información. En concreto, ha hablado de “un nuevo impulso” del Instituto Armado y lo ha ligado todo a la política de remodelación de equipos que inició en enero con la segunda investidura de Pedro Sánchez como presidente del Gobierno.
Fuentes de Interior comentaron ayer que el cese de Pérez de los Cobos se debía a una pérdida de confianza. El coronel fue coordinador del dispositivo del 1-O y estaba ahora al frente de la Comandancia que investiga por orden judicial el inicio del contagio de Covid-19 y la posible relación de la manifestación del 8-M con la expansión del virus en Madrid. Este martes, Grande-Marlaska ha dicho que la sustitución es “únicamente por la política razonable de constitución de nuevos equipos en el ámbito de personal de confianza”.
Es más, tras destacar la trayectoria de Pérez de los Cobos y también del DAO saliente, Grande-Marlaska ha pedido que no se vincule el cese del coronel “con ninguna relación o circunstancia extraña”. “No es perder la confianza ni no perder la confianza”, ha señalado para subrayar que la decisión es del equipo de Interior, en particular de la directora general de la Guardia Civil, María Gámez, y del secretario de Estado de Seguridad, Rafael Pérez.