En ésta se analiza la evolución de la economía andaluza y sus perspectivas a corto y medio plazo. Como en números anteriores, se estructura en tres capítulos, el primero de ellos dedicado al Contexto Económico Internacional y Nacional. El segundo capítulo se centra en la Coyuntura de la Economía Andaluza, trayectoria reciente y previsiones, incorporando los principales indicadores de coyuntura y sus previsiones para Andalucía y España, así como las estimaciones de crecimiento económico. El tercer capítulo analiza la evolución de la Actividad Económica en las Provincias Andaluzas, incluyendo en esta ocasión una breve referencia a las Tendencias actuales del sector turístico andaluz, dada la especial relevancia de esta actividad en el conjunto de la Comunidad Autónoma andaluza.
Finalmente, el documento incluye dos Recuadros de análisis, que inciden en temas de especial interés para las economías andaluza y española, como son, en esta ocasión:
Las exportaciones españolas en el mercado mundial
Los desequilibrios en el saldo comercial: Los casos de Estados Unidos y España
Contexto económico internacional y nacional
Las perspectivas de la economía mundial continúan siendo favorables, pese a la suave moderación en las tasas de crecimiento del PIB de algunas de las principales economías. Por un lado, resulta relevante el descenso en los precios del petróleo, y su transmisión a unas menores tensiones inflacionistas en los países desarrollados. Por otro, destaca la ralentización de la actividad en EE.UU., influida por el freno de la actividad en el mercado de la vivienda y el descenso de la inversión residencial. No obstante, ésta pérdida de dinamismo no afecta en exceso a las previsiones de aterrizaje suave de la economía que ya barajaban los organismos internacionales y la propia Reserva Federal, si bien el retroceso del sector inmobiliario genera dudas sobre las posibles repercusiones en el conjunto de la actividad y en el agregado internacional.
Las últimas estimaciones sobre la economía española y sus proyecciones a corto plazo podría decirse que han sorprendido positivamente. Así, en el tercer trimestre de 2006 el PIB ha proseguido su tendencia de suave aceleración, creciendo un 3,8%, lo que supone el crecimiento trimestral más elevado desde el cuarto trimestre de 2001, si bien el ritmo de crecimiento del empleo se ha desacelerado levemente, lo que evidenciaría una mejora de la productividad. Desde el lado de la demanda, los últimos datos trimestrales reflejan una ligera ralentización del consumo y un crecimiento más estable de la inversión, junto con una aportación menos negativa del sector exterior, escenario que se mantendrá previsiblemente en 2007. Desde el lado de la oferta, destaca la mejora del sector industrial, así como los avances de la construcción y los servicios.
Trayectoria reciente de la coyuntura andaluza
La actividad económica muestra un sólido crecimiento en Andalucía, 3,6% en el tercer trimestre, aunque se aprecia una leve desaceleración, que también comienza a observarse en el mercado laboral. Para el conjunto del año 2006 se estima un crecimiento similar al anterior (3,6% tras la revisión al alza), destacando el avance de los servicios y la construcción, aunque para ambos sectores se prevé una moderación en su ritmo de crecimiento respecto al año 2005. Esta buena marcha de la economía tiene su reflejo en el sector empresarial, y Andalucía es una de las Comunidades Autónomas españolas donde las empresas inscritas en la Seguridad Social han crecido a mayor ritmo desde principios de año.
Los indicadores del mercado de trabajo continúan mostrando una positiva trayectoria, exceptuando el paro registrado en el INEM. El empleo sigue creciendo a tasas elevadas, si bien desde mediados de 2005 se viene apreciando una ligera ralentización en su ritmo de avance. También prosigue el incremento en la afiliación a la Seguridad Social, destacando el crecimiento de los extranjeros. Por su parte, la cifra de parados continúa reduciéndose, debido sobre todo al descenso del paro masculino y juvenil, situándose la tasa de paro en el 12,5% de la población activa, la tasa más baja desde finales de la década de los setenta. Andalucía concentra así una quinta parte del incremento del empleo registrado en España, destacando el aumento entre las mujeres y entre trabajadores de 45 a 54 años y 25 a 44 años, así como el crecimiento relativo en construcción, aunque es en el sector servicios donde más aumenta la cifra de ocupados en términos absolutos. El mercado laboral andaluz sigue caracterizado por su tasa de temporalidad (47,3% de asalariados con contrato temporal), una reducida tasa de parcialidad (12,4% ocupados a tiempo parcial), y una elevada tasa de asalarización (80% de ocupados asalariados), aunque en el último trimestre se ha producido un fuerte incremento relativo entre los empresarios con asalariados, incrementándose a su vez la conversión de contratos en indefinidos.
Algunos indicadores muestran ya una leve ralentización en el crecimiento de la demanda regional y, en este sentido, tanto el leve incremento de la matriculación de turismos o el índice de comercio al por menor, como el aumento, algo más moderado, en la concesión de créditos, evidencian una cierta desaceleración del consumo, en un contexto de subidas en los tipos de interés. Por otro lado, los descensos en las matriculaciones de vehículos de carga y en la producción industrial de bienes de equipo reflejan un menor dinamismo de la inversión, aunque en la actualidad parece que las decisiones de inversión se están viendo apoyadas por la fortaleza que aún mantiene la demanda interior, la mejora de las expectativas en Europa y la recuperación de las exportaciones o los resultados empresariales. Respecto a la demanda externa, las exportaciones de bienes están creciendo a mayor ritmo que en el año 2005, destacando el aumento en productos energéticos y semimanufacturados, aunque este crecimiento, junto a la fortaleza de la demanda interior, está incidiendo en un repunte aún mayor de las importaciones, de ahí que el déficit de la balanza comercial haya superado los 4.000 millones de euros.
El sector servicios aporta alrededor del 61% del VAB (Valor Añadido Bruto) andaluz, y en lo que va de año ha concentrado el 30% del incremento registrado a nivel nacional en el empleo del sector servicios, con más de 150.000 nuevos ocupados, superando a su vez el crecimiento medio en el conjunto de los sectores andaluces (en torno a 91.000 ocupados). La mitad de este crecimiento corresponde al comercio y la hostelería, la rama donde más ha aumentado el empleo, seguida de la de intermediación financiera, actividades inmobiliarias y servicios empresariales. Sin embargo, el empleo en las actividades relacionadas con el transporte, el almacenamiento y las comunicaciones ha crecido a un ritmo bastante más moderado, al igual que el tráfico aéreo de pasajeros o el transporte marítimo, moderación que también se ha observado en algunos indicadores relacionados con el
comercio, como las ventas en grandes superficies. Sin duda, el aumento del empleo en comercio y hostelería, así como el notable incremento de los trabajadores afiliados en hostelería y agencias de viaje (7,2% en lo que va de año), está relacionado con la evolución de la actividad turística, que sigue experimentando un crecimiento muy significativo. Al contrario que en los últimos años, en los que la demanda interna crecía a mayor ritmo, en lo que va de 2006 la demanda extranjera ha crecido levemente por encima de la nacional, continuando la recuperación observada en 2005.
La construcción continúa registrando una elevada actividad, aunque distintos indicadores evidencian una gradual ralentización del crecimiento, como es el caso del consumo de cemento, las viviendas iniciadas o los visados de dirección de obra, disminuyendo también la inversión extranjera en actividades inmobiliarias. Sin embargo, esta evolución no se traslada al mercado de trabajo, registrando el sector en el tercer trimestre el mayor crecimiento relativo del empleo en Andalucía, casi del 9,5%, si bien también la cifra de parados se ha incrementado, denotando la elevada incorporación de trabajadores al sector. También las licencias municipales de obra mostraban en el primer semestre del año un fuerte crecimiento, lo que unido al incremento de la licitación pública, permite anticipar una notable actividad del sector en los próximos meses, si bien sin llegar a alcanzar los elevados niveles de los últimos años. Asimismo, el crecimiento del precio de la vivienda libre continúa moderándose, creciendo en el tercer trimestre de 2006 casi 8 puntos menos que a principios de 2005, coincidiendo esto, sin embargo, con un aumento de las transacciones inmobiliarias, sobre todo de vivienda nueva, al menos en la primera parte del año. Sin duda, la moderación en el crecimiento de los precios está influyendo en el mercado hipotecario, desacelerándose claramente el crecimiento de las hipotecas y el importe de éstas.
Respecto al sector agrario, para 2006 se estima una recuperación de la actividad. De hecho, las primeras estimaciones de la Consejería de Agricultura y Pesca señalan que tanto la producción como el VAB podrían crecer alrededor de un 3% respecto al año 2005, en términos corrientes (incluido el efecto del precio). Sin embargo, el empleo agrario ha vuelto a descender, registrándose así dos trimestres consecutivos de caídas en la cifra de ocupados. Según las citadas estimaciones, la producción vegetal, que representa algo más del 80% de la producción agraria andaluza, podría crecer a una tasa similar a la señalada, en tanto que la producción ganadera crecería en torno a un 2%.
Al igual que en el sector agrario, el número de ocupados en industria ha descendido por segundo trimestre consecutivo, aunque el empleo se sitúa en un nivel incluso superior al de inicios de 2005, dado el fuerte crecimiento registrado en dicho año. El último descenso corresponde en gran medida a la reducción del empleo en las ramas de alimentación, textil, calzado y artes gráficas, que acaparan casi una tercera parte del empleo industrial, y coincide con una caída del índice de producción industrial. Sin embargo, tanto la encuesta de opiniones empresariales como el barómetro empresarial de Andalucía coinciden en señalar una mejora de las expectativas del sector, registrando el indicador de clima industrial en octubre un nivel positivo por primera vez desde abril.
Previsiones económicas
Las primeras estimaciones para 2007, realizadas por Analistas Económicos de Andalucía, apuntan a un crecimiento de la actividad económica en Andalucía del 3,5%, ligeramente inferior a 2006, y por encima del crecimiento previsto para la economía española (3,4%). Exceptuando el sector industrial, el resto de sectores se estima crezcan por encima del 3%, destacando el sector servicios, que será el único en el que la actividad crezca por encima de la media del conjunto de sectores, alcanzando el 3,7%, dos décimas menos que en 2006. Por el contrario, tanto para la industria como para la construcción se anticipa una aceleración en el ritmo de crecimiento con respecto a 2006, moderándose también el crecimiento del sector agrario.
Este crecimiento de la actividad continuará reflejándose en el mercado de trabajo, y aunque se estima una leve ralentización en el ritmo de crecimiento del empleo, la cifra de ocupados crecerá casi un 5% en 2007. Dos terceras partes del empleo seguirán concentrándose en el sector servicios, que junto a la construcción, será de nuevo uno de los motores de la creación de empleo en Andalucía, si bien ya para el primer trimestre de 2007 se anticipa un menor ritmo de avance que en trimestres anteriores, aunque la tasa de crecimiento seguirá siendo superior al 5%, y se acelerará a lo largo del año. Respecto al paro, las previsiones señalan un descenso bastante acusado en 2007, alrededor del 15%, lo que podría situar la tasa de paro en torno al 10%, reduciéndose el diferencial con la tasa española hasta por debajo de los 3 puntos.
ESTIMACIONES DE CRECIMIENTO ECONÓMICO POR SECTORES EN ANDALUCÍA
(Tasas de variación interanual, en %)
2006 (e) 2007 (p)
Agricultura 3,9 3,1
Industria 1,6 2,2
Construcción 3,1 3,4
Servicios 3,9 3,7
Total Sectores 3,6 3,5
(e) Estimación.
(p) Previsión.
Fuente: Analistas Económicos de Andalucía
EVOLUCIÓN DE LOS INDICADORES ECONÓMICOS DE COYUNTURA DE ANDALUCÍA
(Tasas de variación interanual, en %)
2000 2001 2002 2003 2004 2005 2006 (e) 2007 (p)
Empleo Agrícola -0,15 10,32 -3,75 -1,58 -0,56 3,96 -4,48 3,17
IPI General 4,25 1,33 1,50 3,17 4,91 0,99 0,48 2,09
IPI Bienes Consumo 0,53 4,22 2,01 -1,10 3,36 -2,37 -1,55 -2,29
IPI Bienes Inversión 1,95 -5,56 2,21 7,05 11,62 5,28 -4,88 1,38
Empleo Industrial 1,27 2,25 -0,73 3,61 -1,08 10,08 -4,18 0,20
Consumo de Cemento (1) 8,12 12,78 4,58 9,37 14,24 -0,53 -2,77 -3,77
Viviendas Iniciadas 10,14 8,46 -11,70 26,94 -10,90 6,56 6,14 4,43
Empleo Construcción 8,10 9,54 11,50 8,05 11,34 6,01 7,89 7,25
Viajeros Alojados (1) 4,65 1,26 0,84 3,92 5,76 8,74 7,34 8,65
Tráfico Aéreo Pasajeros 10,92 4,47 1,68 10,40 7,64 12,95 5,78 7,78
Empleo Servicios 6,93 4,69 5,11 4,93 5,83 7,33 7,45 5,32
Matriculación Turismos -0,10 0,88 -4,84 10,27 13,26 1,31 0,47 2,20
Créditos S. Privado (Datos al 4º trimestre) 18,95 13,95 15,35 18,09 23,24 31,46 23,34 18,40
Población Activa 2,38 -1,49 5,49 3,11 3,24 3,11 3,69 2,29
Empleo 5,51 5,59 4,19 4,51 5,17 7,11 5,13 4,92
Paro -6,36 -23,75 11,16 -2,63 -5,24 -16,32 -5,29 -15,89
Tasa de Paro (Diferencias en puntos al 4º trimestre) -3,57 -3,55 1,14 -1,91 -2,36 -2,24 -1,76 -1,95
(1) Series enlazadas en 2006 por Analistas Económicos de Andalucía, tras los últimos cambios metodológicos.
(e) Estimaciones. (p) Previsiones.
Fuente: Analistas Económicos de Andalucía, Banco de España, Dirección General de Aviación Civil, Dirección General de Tráfico, Instituto de Estadística de Andalucía, Instituto Nacional de Estadística, Ministerio de Vivienda y OFICEMEN.
En cuanto a los distintos sectores productivos, servicios y construcción mantendrán su dinamismo en 2007, en tanto que la industria se muestra menos dinámica, como evidencian el crecimiento tanto de la producción industrial como del empleo, aunque en ambos casos se estima una mejora con respecto al año 2006. Por su parte, se desacelerará el ritmo de crecimiento de los indicadores de la construcción, como el consumo de cemento o las viviendas iniciadas, desaceleración que no se anticipa para la ocupación, estimándose un crecimiento del empleo algo superior al 7%. En el caso del sector servicios se anticipa lo contrario, es decir, se prevé un crecimiento incluso algo superior al estimado para 2006 en algunos de sus indicadores, como los relacionados con el turismo, en tanto que el empleo crecerá algo menos que en el último año.
Otros indicadores analizados apuntan a un crecimiento algo más moderado del consumo, aunque, si bien la subida de tipos de interés puede incidir en su avance, las expectativas de crecimiento del empleo hacen pensar que éste mantendrá aún un notable dinamismo. La producción de bienes de consumo mantendrá su tendencia negativa, en tanto que los créditos al sector privado, pese a seguir creciendo por encima de un 15%, experimentarán un menor incremento que en el trienio 2004-2006. En cuanto a la inversión, se anticipa una mejora de la producción de bienes de equipo para 2007, recuperándose así del descenso registrado en 2006.
Actividad económica en las provincias andaluzas
Cádiz, Almería y Málaga han sido las provincias que han registrado un mayor crecimiento económico en el tercer trimestre de 2006, con tasas del 4,2%, 4% y 3,7%, respectivamente, observándose, en general, una ligera ralentización en el ritmo de avance. El resto de provincias, exceptuando Jaén, registran también un especial dinamismo, con crecimientos superiores al 3%.
El empleo ha crecido en todas las provincias en el tercer trimestre, destacando, en términos absolutos, los incrementos de Cádiz y Málaga, seguidas de Córdoba, provincia donde se registra el mayor crecimiento relativo. Sin embargo, como hemos señalado, el crecimiento del empleo se está desacelerando levemente desde principios de 2006, apreciándose esto especialmente en la provincia almeriense, así como en Huelva y Sevilla. Pese a ello, la provincia de Almería sigue siendo la que registra una menor tasa de paro en Andalucía, seguida de Málaga, aunque en ambas se ha registrado un elevado aumento en la cifra de parados, aumento que sin duda está asociado a la incorporación de nueva mano de obra al mercado laboral. La construcción y los servicios están siendo los sectores donde más crece el empleo, y exceptuando Málaga, en el caso de la construcción, y Jaén, en los servicios, en el resto de provincias se han registrado incrementos en ambos sectores. Especialmente destacables resultan los aumentos en construcción en las provincias más orientales del litoral andaluz (Almería y Granada), con tasas superiores al 30%, provincias en las que el empleo en el sector servicios también crece por encima de la media andaluza.
La trayectoria de la construcción presenta algunas diferencias territoriales, y mientras los indicadores muestran, en general, una desaceleración en el ritmo de crecimiento de la actividad en el litoral, con excepción de Granada, en las provincias de interior se observa en algunos casos incluso un mayor dinamismo. Así, por ejemplo, mientras las viviendas iniciadas han descendido en Almería, Cádiz, Málaga y Huelva, en Sevilla y Jaén se han producido crecimientos superiores al 25%. No ocurre lo mismo con la actividad turística, observándose un aumento del movimiento hotelero en todas las provincias, si bien es cierto que el crecimiento relativo ha sido más relevante en Cádiz y Jaén, especialmente en la primera. Sin embargo, en Málaga, Sevilla, Granada o Huelva se observa una
ligera ralentización en el crecimiento de la demanda hotelera respecto al conjunto del año 2005, a consecuencia principalmente del menor dinamismo de la demanda interna.
Tendencias actuales del sector turístico andaluz
La relevancia de la actividad turística para la economía andaluza resulta incuestionable, tanto en términos de aportación al VAB como de generación de empleo. El alojamiento hotelero tiene una cuota de mercado de aproximadamente el 57% de los turistas que llegan a Andalucía, aunque en los últimos años va cobrando más importancia el extrahotelero (turismo residencial, apartamentos, acampamentos y alojamiento rural). Desde el punto de vista de la demanda, destaca el mejor balance de Andalucía respecto a España entre 2000 y 2005, atendiendo al aumento registrado en el número de viajeros y pernoctaciones, trayectoria que obedece a un mejor comportamiento de la demanda interna, ya que la extranjera registra una evolución menos positiva en la región andaluza.
Los avances más destacados corresponden a la provincia de Huelva, con un fortísimo aumento de la demanda, tanto en términos de viajeros como de pernoctaciones. También resultan muy significativos los crecimientos de Almería, Cádiz y Granada, siendo en todas ellas más notable, en términos relativos, la variación en la demanda de residentes en España que en la de extranjeros, salvo en Huelva, donde han crecido por igual. Por el contrario, la evolución presenta un balance más modesto en las provincias de Sevilla, Jaén, Córdoba y Málaga, a causa principalmente del menor pulso de la demanda extranjera. En cuanto a las principales zonas turísticas andaluzas, se aprecia una evolución muy favorable de la demanda, y también de la oferta, con un crecimiento más destacado, en general, que en las principales zonas turísticas del ámbito nacional, con excepción quizás de la costa del Sol, donde el crecimiento en el número de viajeros y pernoctaciones resulta relativamente más discreto y similar a las variaciones registradas en otros destinos turísticos nacionales, como los insulares de Mallorca y Tenerife o la costa catalana. De alguna manera, parece intuirse que las zonas turísticas menos comercializadas, y en cierto modo menos maduras, han registrado los aumentos más notables en la recepción de viajeros. Así, el crecimiento más significativo se percibe en la Costa de la Luz de Huelva, donde prácticamente se han duplicado el número de viajeros y pernoctaciones. También el avance ha sido bastante destacado en la Costa Tropical de Granada, la Costa de la Luz de Cádiz y la Costa almeriense.