El Área de Turismo del Ayuntamiento de Málaga ha presentado una iniciativa impulsada por el consistorio con la colaboración de un nutrido grupo de restauradores malagueños basada en la conjugación de lo mejor de la gastronomía de la tierra con la celebración de la segunda Corrida Picassiana.
El próximo sábado santo, 3 de abril, se celebrará la segunda edición de la Corrida Picassiana, la cual ocupa un lugar destacado en el calendario de eventos de la capital y del mundo taurino español e internacional, formando parte desde el año pasado de la rica oferta cultural de Málaga y de la agenda cultural de la capitalidad Málaga 2016.
Este evento va acompañado de una serie de actividades paralelas que ya comenzaron la semana pasada como un concurso de pintura al aire libre, clases de toreo y una mesa redonda sobre el mundo de los toros y la figura de Picasso.
A esta iniciativa del Área de Turismo del Ayuntamiento de Málaga y de la Sociedad Municipal Deportes y Eventos en colaboración con Málaga 2016 encaminada a la promoción turística de la ciudad de Málaga, vinculando la fiesta nacional a la figura de nuestro artista más famoso, Pablo Ruíz Picasso, se une el sector hostelero de la capital, que también han puesto de manifiesto su implicación en la oferta cultural y de ocio malagueña.
Por tanto, una selección de 17 restaurantes malagueños aportará su grano de arena con el objetivo de extender la experiencia de la Corrida Picassiana poniendo en valor la cultura gastronómica de la ciudad durante la Semana Santa.
Los restaurantes, participantes, enclavados en el centro histórico de la ciudad y su entorno serán: Adolfo, Vino Mío, Bodegas El PimPi, Strachan, Montana, Manducare, Mariano, Parador de Gibralfaro, Rúcula, Asako, Sal Gorda, Café de París, Lamoraga Gastrobar (c/Fresca), Mariano, Canela, La Dehesa, y la Tapería de Migue y Paula.
Estos han diseñado sus propios menús en consonancia con la celebración de la Corrida Picassiana.
Cada uno ofrecerá en forma de platos su particular visión de lo que sería un menú Picasiano ligado a la fiesta de los toros. Las cartas, especialmente diseñadas para la ocasión se caracterizan por la variedad en sus platos, en los que el pescado cobran especial protagonismo y los precios oscilan entre los 20 y 50 €.
La libertad a la hora de configurar sus propios menús han llevado a restaurantes como Manducare a bautizar sus platos con nombres propios con motivo de la celebración de la Corrida Picassiana.“Hemos querido que los nombres artísticos de los platos hagan referencia a la tauromaquia y a Picasso”-afirma Ignacio Carmona gerente del restaurante.
“Banderillas sobre el Guernica”, “El Astado sobre el Albero”, “Tarde de Gloria y Sangre de Toro”, son algunos ejemplos de los platos que tal y como afirma Ignacio “estarán formados por productos de la tierra muy vinculados a las tradiciones malagueñas: migas, rabo de toro, jamón ibérico, ajo blanco, boquerones….”.
Los hermanos Conde, que regentan el restaurante Sal Gorda también le han puesto su nombre propio al menú para esta ocasión:“Mariscada Picassiana”. Rafael Conde la describe como “una mariscada muy completa con productos de Málaga”. “En Málaga hay muchísima tradición marisquera, por eso queremos ofrecer al visitante nuestro producto autóctono y además a muy buen precio”.
El restaurante Vino Mío caracterizado por su cocina internacional ha querido crear un menú “muy variado y económico basado en 4 entrantes, 4 platos y dos postres, para que la gente pueda elegir” Además, afirma Helena Mostertman, propietaria del restaurante, “con un pequeño suplemento se pueden incluir otros platos como la carne de cocodrilo”, propuesta habitual en este establecimiento malagueño.
El gerente del restaurante Adolfo, Adolfo Jaime, describe su Menú Picassiano como una “apuesta vanguardista, que romperá moldes, con una selección de productos 100% malagueños”.
El colorido en los platos será la baza del restaurante El Pimpi y del Asako. Elena Cobos García, gerente del Pimpi, destaca lo llamativo que es su segundo plato (selección de tostas) en el que las tostas son “especialmente coloridas en honor a Picasso”. Por su parte, José Sanchez, afirma haber elegido como primeros platos el Uramaki rainbow “por sus colores”; así como el postre que “ a pesar de ser un tiramisú, sólo es reconocible por su sabor, ya que hemos conseguido tres texturas diferentes”. “Es, sin duda, nuestro plato más artístico”-añade.
El restaurante del Parador de Gibralfaro apuesta por la “tradición y modernidad”, así define el menú Natalia Martinez, directora del Parador.
Destaca la utilización de productos como el aguacate, ya que “Málaga es la principal potencia de producción de aguacates y mangos”. “Las conchas de vieira, que es le producto estrella del Parador, también forma parte del Menú Picassiano, sin olvidar el rulo de rabo de toro, “por la afición de Pablo Ruíz Picasso a la tauromaquia”.
José Nalda, gerente de Montana Tapas destaca la “tradición, innovación y desarrollo” en sus prácticas gastronómicas. Esto queda reflejado en sus platos ,entre los que destaca el sorbete de vino Moscatel ; la ensalada de sardinas, el membrillo de tomate, o gachas dulces. Platos para los que “se han empleado las técnicas más innovadoras”.
En cuando a El Rescoldo, “el lugar elegido para la degustación del menú será el salón Picasso, una zona decorada con fotografías de la familia y demás elementos que hacen referencia al pintor” -declara el encargado del establecimiento Fco. Javier Soto Moreno. La empanada de rabo de toro será el plato más llamativo, aprovechando la celebración de la Corrida Picassiana.
Vicente Martinez, PROPIETARIO del restaurante Strachan basa su menú en productos de Málaga como las croquetas de salchichón de Málaga o los boquerones, para darle “un empuje a la gastronomía malagueña” Afirma haberse “documentado para buscar platos que le gustaban especialmente a Pablo Ruíz Picasso, incluyendo por tanto en el menú pescados como el rape”.
Antonio Jesús Plaza, que regenta el Rúcula, afirma seguir en su línea actual pero con algunos toques de Semana Santa. Por eso ha incluido en el menú las torrijas, postre típico de esta época.
Por su parte, Alejandro De La Rubia, jefe de cocina del mesón Mariano destaca el “contraste de sabores” y “la utilización de los productos de la tierra, consiguiendo que en el menú completo se encuentren los 4 sabores básicos: “amargo, dulce, salado y ácido”.
Y es que, la gastronomía malagueña ocupa un lugar muy importante entre los intereses de los turistas que visitan Málaga capital cada año. Junto con las visitas culturales, el disfrute de la gastronomía de la ciudad es una de las principales actividades realizadas por los mismos. Así lo afirman el 41.7%, superando incluso el interés suscitado por la playa (31.9%). Por otra parte, la gastronomía malagueña es valorada con 8 puntos sobre 10, tras el trato recibido y la seguridad del destino.
Elías Bendodo, concejal de turismo del Ayuntamiento de Málaga ha manifestado su ilusión por la puesta en marcha de esta iniciativa definiéndola como la “combinación perfecta”, ya que “si era pionera la idea de crear una Corrida de Toros vinculada a nuestro pintor más internacional, más lo es si se suma la experiencia gastronómica tematizada con el Menú Picassiano. La participación del sector hostelero de Málaga ha sido muy positiva y ha mostrando un alto grado de implicación y creatividad”.